Carta de respuesta de Torcuato de Alvear a Ovidio Lagos (1825-1891) enviada el 4 de octubre de 1883 junto a la cual envia una Memoria Municipal de 1883. Menciona que enviará una copia de el [Digesto] en el momento en que se reimprima. Hace referencia a los homenajes a la Revolución de Mayo y a quienes la iniciaron y da su opinión personal al respecto.

Carta de Bernardo de Irigoyen (1822-1906) a Ovidio Lagos (1825-1891) enviada desde Buenos Aires el 10 de agosto de 1879 por medio de la cual expresa haber recibido su carta del momento en que había abandonado la ciudad. Agradece los amistosos sentimientos expresados por Lagos y manifiesta su correspondencia.

La hoja en la que está escrita la carta posee sello del Director General de Correos y Telégrafos de la República Argentina.

Carta de [Eduardo] Olivera a Ovidio a Lagos (1825-1891) enviada desde Junín en 1879 por medio de la cual le extiende el recorte de una noticia que la Oficina Gral. de Correos y Telégrafos se ha visto obligada a buscar para el Ministerio del Interior. Señala que desde que el Dr. Laspiur está en el Ministerio ha sido atendido inmediatamente. Le ruega que lo ayuda a hacer conocer los motivos por [...]. En un apartado al pie de la carta agrega algunos errores que ha encontrado en el recorte enviado y señala las palabras mal escritas y sus correcciones.

La hoja en la que está escrita la carta posee sello del Director General de Correos y Telégrafos de la República Argentina.

Rectificación de Máximo Terrero a una publicación del Doctor Angel Justiniano Carranza titulada El General Lavalle ante la justicia póstuma publicado en un folle­tín de la Nación a fines de 1879 en Buenos Aires. Dicha publica­ción refiere una entrevista entre Jacinto Peña y Luis Dorrego, portador el primero de una carta de Lavalle para Dorrego, su emoción y agradecimiento; el posterior embargo de bienes de Dorrego por Rosas y su exilio a Brasil junto con Mariano Miró. Rectifica conceptos referentes al saladero de Rosas, José M. Te­rrero y Luis Dorrego y al embargo de sus bienes realizados du­rante el gobierno de Rosas. Estas rectificaciones son refrendadas
por Manuelita Rosas.

Nota del Ministro de Relaciones Exteriores, Bernardo de Irigoyen, al Ministro de Guerra y Marina, Doctor Benjamín Victorica, transcribiéndole por instrucciones del Presidente de la República General Julio A. Roca, algunos párrafos de una carta del General chileno Cornelio Saavedra a su hermano Mariano, referente a los arreglos de límites ajustados entre el gobierno argentino y chileno, su repercusión y los trabajos que viene realizando desde 1861 con respecto a la reducción de los indios, necesitando para ello de la cooperación del gobierno argentino.

Carta de [T. B. Wood] a Ovidio Lagos (1825-1891) enviada desde Montevideo el 20 de octubre de 1882 por medio de la cual da a conocer a su correligionario, el Sr. Juan Robles, tipógrafo de profesión, quién permanecerá por unas semanas en Rosario ocupado en la obra evangélica del Sr. Pinzotti. Estima que debe conocerlo por su participación en la Asamblea Anual Evangélica celebrada en en dicha ciudad y destaca su talento. Señala que la misión evangélica ha empujado al Sr. Robles a abandonar la imprenta "El siglo" de Rosario para valerse por sus propios medios y ayudarlos en las tareas de propaganda haciendo uso de su voz y su pluma.

Despacho extendido por el Presidente de la República Argentina, General Julio A. Roca, al Coronel Nicanor Quirno Costa, confiriéndole el empleo de Coronel de Infantería de línea. Firma autógrafa de: Julio A. Roca y Benjamín Victorica.

Nota fechada el 11 de abril de 1883 relativa a los expedientes entregados por el Dr. D. Francisco de Elizalde en conformidad con el listado enviado por el Sr. Ministro en relación a un acuerdo.

Carta de Rufino Ortega (1847-1917) a Ovidio Lagos (1825-1891) enviada desde Mendoza con fecha del 15 de noviembre de 1883. Comenta que ha recibido y leído con gusto una carta que Lagos le enviara y se muestra agradecido por la distinción hecha a su amigo, el sr. Benegas. Expresa que se encuentra en un lugar apartado de la patria y que por ello no ha podido brindar su ayuda al pueblo santafesino. Advierte que sobre las consecuencias que podría acarrear a Benegas el tener que trasladarse a habitar allí, sin poder llevar a su familia, teniendo en cuenta el clima de esa tierra. Menciona que, tras haber negociado una banca en el Nacional, el señor Benegas había quedado comprometido a regresar a esa sucursal. Advierte sobre las adversidades que podrían aquejar a Mendoza y al Banco Nacional en caso de que Benegas abandonase su puesto en la sucursal aludida con la que, por otra parte, mantiene un compromiso moral. Menciona la necesidad de que allí se normalizase el funcionamiento.